Desarrollo y Emprendimiento

Por qué este blog? Porque he dedicado mi vida profesional a aportar al desarrollo económico de Chile estudiando qué medidas ayudarían más al crecimiento y la equidad, y publicando lo que he ido descubriendo. Ahora quiero aprovechar esta tecnología para ampliar el diálogo con otros sobre este tema.

Mi foto
Nombre: Ernesto Tironi
Ubicación: Las Condes, Santiago, Chile

Economista, empresario y educador (1947). Profesor Ingeniería Industrial Universidad de Chile, Asesor y Director de Empresas y de Sociedades del sector Educacional. Ex embajador ante Naciones Unidas y Gerente General de CORFO.

martes, mayo 22, 2007

EDUCACION: LOCE, lucro, alcaldes desesperados y calidad

Alcaldes amenazan cerrar colegios después del 21 de mayo”…“Alcaldes PDC presagian fin de educación municipal”… “Ultimátum al gobierno”… son sólo algunos titulares recientes. Anticipamos estos problemas en un artículo titulado: “Educación Municipal vs. Subvencionada: El conflicto que viene”, publicado en estas páginas hace ocho meses. ¿Qué ha hecho el Gobierno entretanto? Enviar un Proyecto de Ley para poner fin al lucro en la educación… ¿Qué tiene que ver? Hasta ahora, nadie ha dado una explicación técnicamente razonable. Y se vino el 21 de mayo. ¿Qué irá a proponer la Presidenta ahora? ¿Qué debería proponer?.

Lo más probable es que la Presidenta anuncie más plata para las municipalidades con déficit, haciendo aún mayor la diferencia por alumno para estos establecimientos en relación con los de colegios subvencionados. Pero, si de verdad interesa mejorar la calidad de la educación, eso es exactamente lo que NO hay que hacer así no más, puesto que no hay correlación entre esos déficit y la calidad de la educación en cada comuna. Existen muchos municipios muy chicos que no pueden administrar colegios de calidad aún con más dinero. Tienen pocos alumnos y demasiadas escuelas pequeñas, dispersas y alejadas. La plata sola no arreglará sus problemas. La clave está en las condiciones bajo las cuales se entregarían más recursos; los compromisos que deberían asumir los municipios para recibirla; los plazos, una nueva gestión y su control.

Se necesitan más fondos pero mejor gestionados. Para mejorar la calidad de la educación municipal, los fondos deben destinarse a capacitar a los profesores para hacer mejores clases, actualizar sus conocimientos en las disciplinas que enseñan y cambiar sus prácticas en el aula. No a financiar más Magisters. En segundo lugar, deben destinarse a fusionar o a cerrar ordenadamente, y en un plazo breve, los colegios demasiado chicos o con bajos puntajes SIMCE. En tercer lugar, a ampliar las matrículas de los mejores colegios, trasladando a ellos a los alumnos de las escuelas que deban cerrar. En cuarto lugar, a fusionar Corporaciones Municipales de distintas comunas para alcanzar una eficiencia mínima. Todo esto condicionado a que, de no mejorar sus resultados, se les terminará la subvención igual que a los colegios subvencionados que no logren estándares (puntajes) mínimos de progreso en el aprendizaje de sus alumnos.

El nuevo Plan de Educación Municipal debe partir del ineludible dato empírico de que cambió el contexto en que funcionan los colegios: de un déficit de ellos a superávit . La caída de la natalidad y la construcción de nuevos establecimientos ha llevado a un exceso de vacantes. Hoy se necesitan alrededor de 400 escuelas básicas menos que hace 5 años, especialmente en algunas comunas. Por eso se requiere una re-ingeniería sustantiva de los colegios municipales cuya ubicación, tamaño y características corresponden a la estructura demográfica del Chile de 1960. Por su parte, los colegios subvencionados se han adaptado a la transformación de las ciudades con un retraso mínimo. ¿Cómo, si no, se explica el boom de colegios en Maipú y Puente Alto? Por eso, estos establecimientos son parte de la solución, no de los problemas de la educación chilena actual y debe seguir siendo igual la subvencion por alumno entregada escuelas municipales y particulares subvencionadas.

Si no se hace nada por la educación municipal, se seguirá deteriorando la calidad de sus escuelas pequeñas o mal administradas y los mejores alumnos seguirán emigrando hacia los buenos colegios, especialmente particulares subvencionados. Esto podría impedirse forzando el cierre de colegios subvencionados con la nueva Ley “que pone fin al lucro”. Perderían los alumnos, pero serviría para tranquilizar (por poco tiempo) a los profesores municipales que no están dispuestos a capacitarse y trasladarse. Los dirigentes del Colegio de Profesores, que cultivan ese miedo, cantarán victoria y mantendrán su influencia oponiéndose a la Evaluación y flexibilización del Estatuto Docente, denunciando que las reformas propuestas por los alcaldes llevarían a despidos masivos.

El Plan aquí propuesto tiene que orientarse a ganarle al miedo, apoyando a los profesores en su trabajo en el aula, capacitándolos para recuperar el rol y prestigio que merecen en la sociedad chilena.

Sólo entregar más dinero para colegios municipales con déficits financieros NO mejorará la calidad de su educación. SI se logrará: 1) Otorgando a los alcaldes más atribuciones y flexibilidad para operar, a cambio de resultados concretos. 2) Diseñando un Plan, centrado en la re estructuración de colegios municipales y en la capacitación de profesores, CON la participación de los alcaldes. 3) Ese Plan a unos tres años debe surgir de un grupo de trabajo no tecnocrático ni ideológico, que logre un consenso concreto y sostenible. 4) La ejecución y supervisión del plan debe estar a cargo de un nuevo Ministro y Ministerio de Educación mucho más pequeño, con fuerza y real confianza en el rol primordial de los operadores. ¿Por qué no Brunner de una vez por todas? 5) Por último, comenzar ya con un Plan Piloto en unas 20 municipalidades: gradualidad, ensayo, evaluación, ajuste y extensión.

En resumen: pongamos a los alumnos y profesores primero (no a las burocracias ni a los sindicatos). Así lograremos mejorar la educación.